Macizo de Grigne – Lombardía: paredes de piedra caliza, senderos espectaculares y vistas vertiginosas del lago de Como.
El macizo de Grigne domina el brazo oriental del lago de Como, entre las provincias de Lecco y Como. Compuesta principalmente por la Grigna del Norte (2.410 m, también conocida como Grignone) y la Grigna del Sur (2.177 m, llamada Grignetta), es una de las zonas más populares para excursionistas, montañeros y fotógrafos por su morfología rocosa y variedad de itinerarios. 🥾 Excursiones por bosques, crestas y refugios de altura:
Los senderos que suben por el Grigne parten de diferentes localidades como Pasturo, Ballabio, Mandello del Lario y Esino Lario. Puedes elegir entre paseos por el bosque, rutas equipadas y escaladas de crestas. La densa red de refugios también hace que el macizo sea adecuado para caminatas de varios días.
👉 Consejo: Subiendo desde el Refugio Pialeral hasta el Refugio Brioschi, se atraviesan prados, morrenas y crestas con una amplia vista de todo el lago y de los picos alpinos más lejanos. 🧗 Riscos, agujas y vías ferratas:
La Grignetta es famosa por sus agujas de piedra caliza, un destino histórico para montañeros y escaladores. Ofrece numerosas vías ferratas y paredes equipadas, también frecuentadas para el entrenamiento. Las estructuras verticales emergen del bosque de repente, creando un paisaje único.
👉 Consejo: Camina por la Ferrata del Centenario del CAO si tienes experiencia: es una de las más pintorescas y espectaculares de todo el arco prealpino. 🌄 Miradores y ambientes salvajes:
Desde los puntos altos del Grigne hay una vista ampliada del lago, el valle del Po y los Alpes Réticos. El entorno, duro y rocoso a gran altura, contrasta con los bosques y pastos de las laderas más bajas, ofreciendo escenarios muy diferentes en un mismo día.
👉 Consejo: Llega a la Porta di Prada desde el lado de Esino: un arco natural en la roca que enmarca el lago con gran encanto. 🏘️ Cultura alpina y vida en cabañas:
El macizo está salpicado de cabañas, establos, pastos alpinos y refugios, muchos de los cuales están activos durante todo el año. Algunos son simples puntos de apoyo, otros ofrecen platos típicos, habitaciones y terrazas panorámicas. El contacto con la montaña es directo, sin florituras, pero siempre auténtico.
👉 Consejo: Pasa una noche en el Refugio Rosalba: el amanecer que ilumina las agujas de la Grignetta es un espectáculo que vale la pena cada paso.
Los Grigne no conceden nada por casualidad: cada subida es una conquista, cada vislumbre se gana. Una montaña que habla alto y claro, sin concesiones.