Golfo de Orosei y Parque Nacional de Gennargentu – Cerdeña: picos salvajes, cañones escondidos y playas de alabastro. El Golfo de Orosei y el Parque Nacional de Gennargentu es una de las zonas más grandes e intactas de Cerdeña. Se extiende entre el macizo de Gennargentu y la costa este, abrazando paisajes vertiginosos, gargantas profundas, bosques primitivos y algunas de las playas más espectaculares del Mediterráneo. Aquí, la naturaleza y el aislamiento dibujan un territorio áspero y magnífico. ⛰️ El corazón salvaje de la isla: Gennargentu es el relieve más alto de Cerdeña, con picos que superan los 1.800 metros, como Punta La Marmora. En invierno se cubren de nieve, en verano se convierten en mesetas doradas. Las montañas albergan una fauna única: muflones, águilas reales, zorros e incluso ciervos sardos encuentran refugio en bosques de encinas y valles remotos. 👉 Consejo: Salga al amanecer a hacer una caminata por Bruncu Spina: el panorama se extiende hasta el mar y es pura libertad visual. 🌊 El Golfo de Orosei y las playas inaccesibles: En la costa este del parque se encuentran algunas de las playas más emblemáticas de Cerdeña: Cala Luna, Cala Goloritzé, Cala Mariolu, Cala Sisine. Bahías de guijarros blancos y acantilados escarpados se suceden entre calas a las que solo se puede llegar por mar o por largos senderos. El mar tiene tonos que van del turquesa al azul profundo. 👉 Consejo: Confía en una excursión en barco desde Cala Gonone o Santa Maria Navarrese: navegar bajo las paredes de piedra caliza es una emoción total. 🌿 Gargantas, manantiales y bosques milenarios: Dentro del parque hay senderos salvajes como el Desfiladero de Gorropu, uno de los cañones más profundos de Europa, o los senderos que conducen al pueblo nurágico de Tiscali, escondido dentro de un sumidero. Bosques de tejos, acebos y encinas centenarias se alternan con paisajes lunares y mesetas silenciosas. 👉 Consejo: Tome el camino hacia el manantial Su Gologone: agua pura, vegetación exuberante y paz absoluta. 🏛️ Cultura arcaica y pastoreo vivo: El parque también es una reserva cultural. Pueblos como Orgosolo, Urzulei, Dorgali y Oliena conservan una fuerte identidad vinculada a la ganadería ovina, la artesanía y una lengua ancestral. Los murales de Orgosolo cuentan la historia de un pueblo resistente, mientras que los aromas del pan carasau y el queso pecorino añejo acompañan cada encuentro. 👉 Consejo: Visite un redil a gran altitud durante el verano: puede ver el ordeño y disfrutar de ricotta caliente en las montañas. 🚶 Naturaleza para ser experimentada en profundidad: El parque es ideal para aquellos que buscan senderismo real, fuera de los caminos trillados. Senderos, talones, cuevas y cañones crean un paisaje dinámico e inmersivo. Muchas zonas solo son accesibles a pie o con guías locales: una invitación a reducir la velocidad, observar y sumergirse en la naturaleza más virgen de la isla. 👉 Consejo: Si no conoces la zona, confía en guías expertos para las rutas más desafiantes: la seguridad y el conocimiento marcan la diferencia. En este parque, Cerdeña deja de parecerse a una isla: se convierte en un continente, ancestral y atemporal.