Reserva Natural Gola del Furlo – Marche: un cañón de maravillas entre naturaleza, historia y silencios milenarios. Enclavada entre las montañas de Monte Pietralata y Monte Paganuccio, la Reserva Natural de la Gola del Furlo es una de las joyas naturalistas más espectaculares de la región de Las Marcas. Este profundo cañón excavado por el río Candigliano ofrece vistas vertiginosas, imponentes paredes de piedra caliza y una biodiversidad muy rica, a pocos kilómetros de Acqualagna, hogar de la trufa. 🧭 Senderos escénicos y áreas silvestres: La reserva está atravesada por numerosas rutas de senderismo aptas para todos los niveles, que serpentean a través de bosques, picos y balcones naturales con vistas al desfiladero. Entre los más conocidos, el camino del Furlo y la subida al Monte Pietralata, con espectaculares vistas del valle. 👉 Consejo: Dirígete a la terraza panorámica del Belvedere para admirar el desfiladero desde arriba y, con un poco de suerte, echar un vistazo al águila real en vuelo. 🦅 Fauna protegida y grandes rapaces: La garganta del Furlo es un paraíso para la observación de aves: el águila real, el halcón peregrino y el nido de cuervos. El microclima del cañón también es el hogar de gamos, corzos, gatos salvajes y una flora diversa que va desde helechos hasta plantas de roca. 👉 Consejo: Lleva prismáticos y visita el centro de educación ambiental: podrás descubrir las huellas de los animales y las especies vegetales más raras de la reserva. 🏛️ Un viaje a través de la historia: El desfiladero del Furlo está atravesado por la histórica Via Flaminia, todavía visible en algunos tramos. Entre las curiosidades, el famoso túnel romano excavado en la roca en la época del emperador Vespasiano, una obra de ingeniería que fascina a grandes y pequeños. 👉 Consejo: Toma el camino histórico a lo largo del río para caminar exactamente por donde pasaron los romanos, entre antiguos túneles y vistas únicas del desfiladero. 🍃 Relax, sabor y pueblos cercanos: Después de la excursión, es agradable detenerse en los alrededores para saborear los productos típicos: trufa blanca y negra, quesos locales, miel, embutidos y vinos sinceros de Montefeltro. Tampoco hay que perderse un paseo por Acqualagna o Fossombrone. 👉 Consejo: Si estás por la zona en otoño, no te pierdas la Feria Nacional de la Trufa en Acqualagna: un derroche de aromas y sabores de la tierra. En el desfiladero del Furlo, la naturaleza cuenta historias antiguas entre paredes esculpidas por el tiempo, y el silencio se convierte en el compañero perfecto para aquellos que buscan maravillas.